La empresa española Flightech Systems consigue certificar el primer avión no tripulado para uso civil de Europa que podría ser utilizado en extinción de incendios o vigilancia de fronteras, por un coste inferior al de los sistemas tradicionales.
El avión no tripulado español cuenta con una envergadura de seis metros, un peso de 80 kilos, un radio de acción de 500 kilómetros, una velocidad máxima de 150 kilómetros a la hora, una autonomía de 4,5 horas de vuelo y la posibilidad de alcanzar una altitud de 6.096 metros. Por todo ello, este avión de la firma Flightech Systems ha logrado tener la certificación de la Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA).
El primer drone matriculado en Europa puede aterrizar y despegar en espacios muy reducidos y con gran operatividad y puede ser destinado a distintos usos civiles del ámbito científico, medioambiental, meteorológico, del campo de la investigación o de la seguridad. Tiene multitud de sistemas de captación de datos que permiten hacer un seguimiento real desde una estación en tierra.
Así, en el caso de la vigilancia forestal, un piloto podría controlar desde la estación de tierra todos los parámetros de vuelo a través de un panel central con cuatro monitores. De este modo, la persona designada por la Administración controlaría las imágenes y la información enviada para poder sofocar o prevenir el fuego (en caso de incendio).
